¿Por qué es importante contar con un médico deportivo?

Muchas veces pensamos que tener un médico deportivo es sólo cosa de deportistas profesionales, de los futbolistas o atletas que vemos por televisión cuando van a realizarse los habituales chequeos o cuando sufren alguna lesión y vemos por los medios de comunicación cómo les atienden.

Pero, si practicamos habitualmente deporte, también es imprescindible realizarse reconocimientos médicos periódicamente. Además, contar con un médico deportivo nos ayudará, no sólo a tratar y curar más rápidamente las futuras lesiones que puedan surgir, sino también a prevenirlas.

Reconocimiento médico

La Federación Española de Medicina del Deporte señala que los reconocimientos médicos no sólo se deben realizar cuando exista obligación legal, sino que recomienda realizarlos una vez al año en niños, adolescentes y adultos que practiquen un deporte federado o que busquen mejorar su rendimiento físico.

Un reconocimiento médico-deportivo consta de múltiples pruebas: historia médico-deportiva, exploración física general, exploración osteomuscular con balance morfoestático, valoración antropométrica, espirometría (un estudio indoloro del volumen y ritmo del flujo de aire dentro de los pulmones), electrocardiograma en reposo, ecocardiograma-doppler y una prueba de esfuerzo.

En Inertial disponemos de un equipo de medicina deportiva con una dilatada experiencia. Así pues, cuando un nuevo cliente empieza con nosotros, le realizamos una prueba de aptitud médica para tener total seguridad sobre su salud y el estado inicial de esa persona y tener en cuenta las características y particularidades de cada uno.

Funciones

Pero un médico deportivo no sólo se encarga de realizar revisiones periódicas, tiene muchas más funciones de las que nos imaginamos:

• Analiza el estado de salud del paciente y su aptitud para el ejercicio físico.
• Ayuda al entrenador  a diseñar el programa de ejercicios más adecuado.
• Hace hincapié en el trabajo preventivo del deportista, el calentamiento y los estiramientos.
• Refuerza la musculatura necesaria para soportar la práctica de cada tipo de deporte.
• Previene, diagnostica y trata las lesiones.
• Previene y trata algunas enfermedades como la diabetes, la hipertensión, las cardiopatías o la obesidad, con programas adecuados de ejercicio físico.
• Proporciona consejos médicos sobre los hábitos saludables (ejercicio físico, nutrición y estilo de vida).

De hecho, un médico deportivo trabaja en coordinación con los entrenadores, los preparadores físicos, fisioterapeutas y nutricionistas para organizar todo el plan de ejercicios de los deportistas.

Porque, en definitiva, no sólo se trata de ponerse en marcha y mantenerse activo, sino de hacerlo también de la forma más adecuada para cada persona.